No es lo mismo decir que creemos en Dios, que decir: siento a Dios. Vemos a personas que viven sus vidas dedicadas a la iglesia y a la religión, vemos personas que no desean saber nada sobre Dios y vemos personas que sin religiosidad ni mucho ruido, reflejan amor, reflejan paz, reflejan esperanza y reflejan felicidad aun en los peores momentos o circunstancias de sus vidas.
¿Pero cómo es posible que unos logren sentirse plenos y otros no? ¿Cómo se vive en paz y armonía con Dios y con los pies puestos en la Tierra? ¿Cómo sentimos a Dios activamente en nuestras vidas?
• Arrepintiéndonos de nuestros pecados delante de Dios todos los días.
• Aceptando que Jesús murió por nosotros limpiando nuestros pecados.
• Aceptando que Jesús resucitó y venció la muerte.
• Aceptando que en Jesús tenemos vida eterna.
• Aceptando que Jesús es el dueño y Señor de nuestras vidas
• Conociéndole a Él; no solo aprender sobre Él.
• Dejemos de dominar nuestra vida, démosle la oportunidad al Espíritu de Dios como se la damos a otros y a otras cosas.
¿Cómo le conocemos íntimamente?
· Leyendo la Biblia todos los días al igual que vemos nuestro celular.
· Meditar en la Palabra para que el Espíritu Santo se haga viva en nosotros.
· Hablando con el Espíritu de Dios a cualquier hora, en cualquier lugar.
· Dedicándole tiempo de calidad al Espíritu de Dios para tener mas intimidad con El.
· Cultivando una relación de íntimos, de sinceridad.
· Tengamos confianza, entreguémosle los miedos y las inseguridades.
Resultados cuando el Espíritu de Dios es quien guía nuestras decisiones en TODOS los aspectos.
· Vidas plenas: con todo, con menos o con nada.
· Circunstancias buenas y menos favorables:
pero nuestra actitud positiva y nuestra paz son inquebrantables.
· Objetivo de vida definido, listos y adaptables a los cambios en todo tiempo.
Entonces Jesús le dijo: —Yo soy la resurrección y la vida. El que cree en mí vivirá, aunque muera; y todo el que vive y cree en mí no morirá jamás. ¿Crees esto? Juan 11:25-26 | NVI
Escrito por Ohamie Avilés